Lo consiguieron. Buena parte de las redes de ciudades latinoamericanas alcanzaron un consenso que hace posible tener una voz única ante CGLU, en la Cumbre Mundial de Líderes Locales y Regionales, una voz caracterizada por la cordialidad y el deseo de representar los anhelos urbanos y latinoamericanos en el tablero de lo global.
Entre el 12 y el 15 de octubre, esa voz alcanzada en la mesa de diálogo, a la que denominaron CORDIAL y que integraron UCCI, FLACMA, Mercociudades y AL-LAs, se pondrá a prueba. Lo hará conversando con el resto de las ciudades y entre ellas, pues la unidad no merma la diversidad, de la Agenda Global de los Gobiernos Locales y Regionales para el siglo XXI.
El reto de alcanzar un acuerdo ante citas globales como esta Cumbre lleva latente años. Ya en 2013, en la Reunión de Alcaldes y Autoridades Locales de América Latina, los alcaldes latinoamericanos tomaron conciencia de que no tenían la presencia, ni la influencia deseada en citas como la de CGLU. En 2014, en el 7º Foro Urbano Mundial organizado en Medellín (Colombia) asumieron como problema propio su falta de incidencia global.
El papel de las redes de ciudades tuvo su punto de inflexión en diciembre de 2015, en la COP 21 de París, donde se acordó generar un espacio de diálogo en pos de la unidad en la diversidad. Este compromiso prosiguió en cuatro citas en La Paz, Panamá y Madrid, apoyadas por UCCI.
Estos esfuerzos se traducen hoy en una voz latinoamericana, unida, diversa, cordial que hablará a lo global de lo local.
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