Madrid, 4 de enero de 2019 (ANCI).- El Ayuntamiento de Barcelona renovará y ampliará su servicio municipal de bicicletas (Bicing) en 2019. Las principales novedades de las que se beneficiara la ciudadanía son el servicio ininterrumpido, el aumento de la cantidad de bicicletas eléctricas y mejoras en el diseño, entre otras.
La revisión del sistema llega una década después de su puesta en funcionamiento, periodo en el cual la elección de la bicicleta como medio de transporte alternativo al vehículo privado ha crecido exponencialmente, asegura en un comunicado el consistorio catalán.
La primera fase de la renovación y ampliación del sistema municipal de bicicletas contempla la activación del servicio de 24 horas, mientas que en la siguiente etapa se aumentará la cantidad de bicicletas eléctricas de 300 a 1.000 unidades y se incrementará la cobertura del servicio con la habilitación de nuevas estaciones en barrios donde actualmente no hay servicio y en aquellos en los que la demanda es muy elevada.
Según los datos del consistorio barcelonés, el sistema de bicicletas municipal cuenta con alrededor de 106.000 abonados y en el acumulado de 2018 (con datos actualizados a 10 de octubre de ese año) se realizaron 9,7 millones de viajes con un tiempo medio de uso de casi 14 minutos. Asimismo, el sistema cuenta con 6.000 vehículos y 420 estaciones repartidas por distintas zonas de la ciudad.
La renovación del servicio municipal de bicicleta “prevé que se incremente el uso un 10 % en una década, hasta 16 millones de desplazamientos anuales”, señala el Ayuntamiento, que agrega que la mejora del sistema se une al incremento de la red de carriles bici, que se ha “ampliado un 72 % en cuatro años”.
Impulso a la movilidad sostenible y lucha contra el cambio climático
La apuesta del Ayuntamiento de Barcelona por la movilidad sostenible va más allá del fomento de la utilización de la bicicleta. La ciudad suscribió, junto a Quito, Ciudad de México y otras 9 grandes urbes la “Declaración de calles libres de combustible”, en la que las partes firmantes se comprometen a renovar su flota de autobuses hasta 2025 para que en esa fecha todos los vehículos de la misma sean de cero emisiones. Además, las 12 metrópolis que forman parte del acuerdo se ponen la meta de que algunas áreas de su trazado urbano sean consideradas de cero emisiones en 2030.
En el momento de la firma del acuerdo, surgido del encuentro de alcaldes organizado por la red C40 en octubre de 2017 en París, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, subrayó que las “ciudades tienen que ser las auténticas protagonistas en la lucha contra el cambio climático” y reclamó que “para afrontar este reto es imprescindible tener más competencias y más presupuesto”.