[:es]Madrid, 4 de diciembre de 2017.- Desde 1992 se celebra cada 3 de diciembre el Día Internacional de las Personas con discapacidad, una jornada que sirve para promover los derechos de este sector poblacional que, según la ONU, “suele tener menos oportunidades económicas, peor acceso a la educación y tasas de pobreza más altas”.
Las ciudades iberoamericanas se han sumado a la conmemoración de esta fecha con diferentes actividades y han apostado por lograr espacios urbanos más accesibles e inclusivos para no dejar a nadie de lado.
Festivales de cine centrados en la temática, diversas actividades culturales, reuniones de los alcaldes con asociaciones, jornadas sobre la discapacidad y la inclusión en los protocolos de actuación policial del tratamiento y abordaje de las personas con diversidad funcional son solo algunas de las iniciativas que se han desarrollado en el marco de esta fecha en varias de las urbes que forman parte de la Unión de Ciudades Capitales Iberoamericanas (UCCI).
La “minoría más amplia del mundo”
De esta forma se refiere la ONU a las personas con discapacidad, un sector de la población que “suele tener menos oportunidades económicas, peor acceso a la educación y tasas de pobreza más altas” debido principalmente a “la falta de servicios que les puedan facilitar la vida (como acceso a la información o al transporte) y porque tienen menos recursos para defender sus derechos”.
No cabe duda de que los Gobiernos locales tienen un rol principal para lograr que las personas con discapacidad puedan disfrutar plenamente de sus derechos y por ello resulta de vital importancia que las ciudades se sumen a jornadas como las del 3 de diciembre para sensibilizar a la gente acerca de los problemas diarios que vive la “minoría más amplia del mundo”.
En ese sentido, la ONU recalca que a la falta de oportunidades se suman otros factores como “la discriminación social y la falta de legislación adecuada para proteger” a estas personas, que “a menudo son víctimas de la violencia”. De hecho, los niños discapacitados tienen cuatro veces más posibilidades de ser víctimas de actos violentos, la misma proporción que los adultos con problemas mentales.
“La ignorancia es en gran parte responsable de la estigmatización y la discriminación que padecen las personas discapacitadas”, subraya la ONU.
Para luchar contra estos elementos, surgió en diciembre de 2006 la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, que reconoce que la existencia de todos los factores señalados anteriormente son un componente esencial de la marginación que sufren en numerosas ocasiones. ANCI[:]