[:es]Madrid, 2 de octubre de 2017 (ANCI).- “Abordar las necesidades de vivienda de los más pobres y vulnerables, especialmente mujeres y jóvenes, y de aquellos que viven en barrios marginales, debe ser una prioridad en las agendas de desarrollo”, ha asegurado hoy el director ejecutivo de ONU-Hábitat, Joan Clos, con motivo del Día Mundial del Hábitat.
En su mensaje, ha destacado que actualmente hay 1.600 millones de personas que no tienen una vivienda digna, de las cuales, 1.000 millones viven en barrios marginales y asentamientos informales. Estas cifras se dan en un contexto en el que el número de casas sin ocupar “sigue aumentando gradualmente”, ha aseverado Clos.
“Para que la vivienda contribuya al desarrollo socio-económico nacional y al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), la Nueva Agenda Urbana hace un llamamiento para que las políticas de vivienda estén en el centro de las políticas nacionales urbanas, acompañadas de estrategias para luchar contra la pobreza, la mejora de la salud y el fomento del empleo”, ha agregado el director de ONU-Hábitat en su alocución.
Además, ha recalcado la necesidad de un compromiso global en el que se incluyan acciones urgentes para hacer posible que haya hogares asequibles para toda la ciudadanía, algo que debe redundar en el incremento de la paz social y de la igualdad. Asimismo, el impacto de unas políticas de vivienda certeras también se notará en la lucha contra el cambio climático, mejorará la movilidad urbana y la eficiencia del consumo de energía.
En ese sentido, el análisis realizado desde ONU-Hábitat en los últimos 20 años refleja que “a pesar de la creciente demanda, la vivienda -tanto de alquiler como la compra de la misma- ha sido en gran medida inasequible para la mayoría de la población mundial. Dejar la vivienda en manos del mercado no ha conseguido garantizar la provisión de vivienda asequible y adecuada para todos y todas. Cabe también recordar que la vivienda estuvo en el epicentro de la erupción de la crisis económica mundial de 2008, en lugar de estar en el centro de las políticas urbanas”.[:]