La falta de planificación pasó factura a la ciudad brasileña de Belo Horizonte hoy se trabaja contra los focos de desigualdad generados desde frentes como el transporte, la energía, el saneamiento y la adaptación a las necesidades de la ciudad. Sin embargo, la secretaria municipal adjunta de Relaciones Internacionales de la urbe, Stephania Aleixo, que acudió en representación del proyecto eurolatinoamericano AL-LAs a CONAMA, destacó el papel de enfrentar estos retos ‘en red’, con otras ciudades que comparten inquietudes y que albergan soluciones que podrían ser comunes.
«Hay que narrar los retos comunes, los retos globales, la ciudad». Es el momento de comunicar para Aleixo, quien llamó al trabajo conjunto, además de reclamar un lugar en la mesa global desde el que las ciudades puedan aportar a las normativas y decisiones que marcarán la vida en la ciudad su gran valor: su experiencia. Sin embargo, este trabajo no solo requiere ilusión, también exige formación. La diplomacia de las ciudades es un reto de hoy, de acuerdo con sus palabras.
La ciudad tiene así un reto para enfrentar los problemas contemporáneos, entre los que se encuentran los medioambientales: «hay que contar los problemas globales para que entren en la agenda local». La ciudad tiene así que encontrar su relato, su forma de narrarse, para así generar una voz que le permita actuar frente a los problemas globales.
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