La Administración de la alcaldesa Claudia López presentó el Plan de Acción Climática – PAC 2020-2050, una hoja de ruta muy ambiciosa para los próximos 30 años que le permitirá a la ciudad cumplir con las metas de mitigación y adaptación al cambio climático. Reducir en un 15% las emisiones de gases de efecto invernadero – GEI a 2024 y hasta en un 50% al 2030, también obtener la neutralidad en carbono en 2050 y aumentar la resiliencia a los cambios presentes y futuros en el clima son los retos de este propósito.
“Nos enorgullece mucho estarnos poniendo metas concretas, en este caso tenemos 11 metas de mitigación, es decir de capturar y reducir gases de efecto invernadero; tenemos 15 metas de adaptación y tenemos cuatro metas transversales, son metas de ciudad, interinstitucionales, de toda la Alcaldía, pero también metas que comprometen las acciones de los demás agentes de la ciudad (hogares, residencias, industrias, etc)”, enunció la Alcaldesa Mayor, quien agregó que “necesitamos aprender a vivir distinto, a consumir distinto, a movilizarnos distinto y a hacer nuestras edificaciones de manera distinta”.
En efecto, el PAC presentado con motivo de la celebración del Día Internacional de la Tierra, contiene 30 ambiciosos retos que deberán ser ejecutados por el sector público, las empresas y la ciudadanía a partir de ahora para transitar hacia un modelo de ciudad más sostenible y contribuir al cumplimiento de los compromisos mundiales establecidos en el Acuerdo de París en 2015, que busca evitar un incremento por encima de 2°C en la temperatura global, en comparación con los niveles preindustriales.
La mejor inversión de Bogotá para ser carbono neutrales, en el 2050, es basar nuestro Sistema Masivo de Transporte en una red eléctrica, libre, limpia, sostenible, pública, no solo urbana, sino regional. Sustituir buses diesel, como base del sistema masivo, por una red de Metro. pic.twitter.com/WiXW31GEXp
— Claudia López ? (@ClaudiaLopez) April 22, 2021
Además, esta hoja de ruta permitirá enfrentar amenazas como avenidas torrenciales (crecientes repentinas), inundaciones, movimientos en masa, incendios forestales e islas de calor urbanas que podrían afectar con mayor frecuencia a Bogotá en el futuro, esto según la Evaluación de los Riesgos en Escenarios de Cambio Climático.
Las medidas sugeridas en el Plan de Acción Climática están relacionadas con el aumento de espacios verdes, soluciones basadas en la naturaleza, modelos de producción y consumo amigables con el ambiente, movilidad sostenible y cambio de hábitos en las personas.
En el PAC se integraron las metas del Plan de Desarrollo Distrital con 11 de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible –ODS-, y los compromisos de la agenda del grupo C40 Cities para lograr un aire y calles más limpias de combustibles fósiles. Adicionalmente, se tuvieron en cuenta esfuerzos del pasado como el Plan Distrital de Gestión de Riesgos y Cambio Climático de 2015, y el Plan Distrital de Gestión del Riesgo de Desastres y del Cambio Climático de 2018.
Para la construcción de esta hoja de ruta, la Secretaría de Ambiente, como entidad del Distrito que lidera y articula la agenda de mitigación en Bogotá, contó con los aportes del sector público, las organizaciones privadas, la academia y la comunidad.
¿Qué tipo de acciones tiene el Plan de Acción Climática?
— Alcaldía de Bogotá (@Bogota) April 22, 2021
?11 de mitigación para reducir emisiones de GEI
?15 de adaptación para disminuir riesgo y aumentar resiliencia
?4 enfocadas en gobernanza, ordenamiento territorial, inclusión y articulación#ContraElCambioClimáticoYo pic.twitter.com/vWJBnnmFG2
El PAC está proyectado para ejecutarse en los 30 años, pero deberá ser actualizado periódicamente por las futuras administraciones, según el avance en su implementación y el surgimiento de nuevas alternativas y tecnologías que pueden contribuir a la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero – GEI como el dióxido de carbono (CO2), el óxido nitroso (N20), el metano (CH4) los hidrofluorocarbonos (HFC), los perfluorocarbonos (PFC) y el hexafluoruro de azufre (SF6).
“La mejor inversión de Bogotá para cumplir esa meta, la de ser carbononeutrales, en el 2050, es basar nuestro Sistema Masivo de Transporte en una red eléctrica, libre, limpia, sostenible, pública, no solo urbana, sino regional. Sustituir buses diesel, como base del sistema masivo, por una red de Metro eléctrica, sostenible, urbana y regional”, subrayó la alcaldesa Claudia López.
Por último insistió en que la Administración Distrital, por cada árbol talado, está sembrando cinco. “Todos los ciudadanos deberían estar encima de esta y de otras administraciones hacia el futuro, para que cada vez que talemos un árbol se siembren, por lo menos, cinco. Es lo menos que nos debemos proponer, y que en la medida de lo posible queden en el mismo sitio”, recalcó.
Los sectores que más generan gases de efecto invernadero (GEI) en la ciudad
El Plan de Acción Climática 2020-2050 también incluye el Inventario de Emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) 2017, un documento que permite identificar las principales fuentes de emisión en la ciudad.
De acuerdo con este reporte, durante el año en mención fueron emitidas 11.421.724 toneladas de CO2 equivalente (tCO2e) en Bogotá. Los sectores con mayor aporte son: el transporte, con una participación del 48%; consumo energético en el ámbito residencial, comercial e institucional (19%); industria manufacturera y de la construcción (15%); disposición final de residuos sólidos (13%), y aguas residuales y domésticas (5%).
Los dos primeros sectores incluyen las emisiones derivadas del consumo de combustibles fósiles, biomasa y energía eléctrica en sus actividades, y el tercero se refiere a las ocasionadas por el tratamiento o la disposición final de residuos sólidos y líquidos en Bogotá, en sitios ubicados dentro de la ciudad o, en menor medida, fuera de los límites. De igual manera, contiene las originadas por aguas residuales y domésticas.
“¿Qué pasaría si Bogotá no se compromete a mitigar sus gases de efecto invernadero? Continuaremos incrementando nuestras emisiones de manera dramática. Por eso, a partir de las acciones acordadas en este PAC, con cada uno de los sectores, debemos definir cuál es el potencial de mitigación de cada uno”, indicó la secretaria de Ambiente, Carolina Urrutia.
“Si en 2017 hubiéramos tomado estas decisiones de manera ambiciosa, podríamos tener una trayectoria ideal, que nos permitiera llegar al 2050 carbononeutrales, sin tantos sacrificios en estos primeros años. Por eso, no hay tiempo qué perder”, agregó.
Adaptación y mitigación al cambio climático, una prioridad para Bogotá
La administración de la alcaldesa Claudia López, reconoce la urgencia de enfrentar el cambio climático y, en este sentido, ha dado grandes pasos para lograrlo. Al PAC y la actualización del inventario de GEI, se suma la declaración de la crisis climática realizada en febrero de 2020 por la mandataria y los gobernadores de Boyacá, Cundinamarca, Huila, Meta y Tolima en Sumapaz.
En dicho momento acordaron diez compromisos para contribuir a la reducción de gases de efecto invernadero, proteger los ecosistemas y aumentar la resiliencia de la región central.
De igual manera, en julio del año anterior, Bogotá firmó un pacto con el Grupo de Liderazgo Climático C40 para trabajar en los próximos diez años por un aire y calles libres de combustibles fósiles. Cabe resaltar que la alcaldesa es la vicepresidenta de este grupo; y en octubre pasado, la secretaria de Ambiente, empezó a formar parte de la junta directiva.
Desde esta posición, y en nombre del Distrito, seguirán uniendo esfuerzos y motivarán a otras ciudades de América Latina a comprometerse con una acción climática efectiva.
De hecho, gracias a las metas, presupuestos y acciones desarrolladas por la Administración Distrital para enfrentar el cambio climático, Bogotá fue reconocida, el pasado 10 de marzo, como una de las promesas climáticas de Colombia por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible.
“En el POT vamos a ver una ciudad pensada hacia la sostenibilidad de la movilidad en general, no solo de transporte, una ciudad que se piensa en código de sostenibilidad en términos de cuáles son los trayectos que debemos cubrir todos los días y cómo lo vamos a lograr”, anticipó Urrutia.
Acciones para contribuir a las metas de adaptación y mitigación al cambio climático
Disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero es un reto que requiere del esfuerzo de todos los sectores de la sociedad. Estas son solo algunas de las acciones que las entidades públicas, las organizaciones privadas y la ciudadanía debemos empezar a aplicar con mayor frecuencia para reducir el riesgo y mitigar el cambio climático:
1-Caminar o usar la bicicleta para ir al trabajo o la universidad.
2-Separar adecuadamente los residuos en las bolsas blanca, verde y negra.
3-Entregar los residuos especiales y peligrosos a recolectores autorizados.
4-Reducir el uso de combustibles fósiles.
5-Tomar duchas cortas, utilizar el agua lluvia y cerrar los grifos mientras no estén en uso.
6-Adoptar tecnologías limpias en los procesos de producción.
7-Reincorporar los residuos que sean aprovechables en nuevos procesos.
8-Utilizar bombillos ahorradores y tecnologías que garanticen un menor uso de energía.
9-Ejecutar acciones que permitan evitar incendios en los escenarios naturales.
10-Adecuar espacios para impulsar el uso de medios de transporte alternativos como la bicicleta, la patineta o caminar.
11-Proteger los ecosistemas mediante acciones de cuidado, conservación y restauración ecológica.
12-Incorporar paulatinamente fuentes de energía bajas en carbono o cero emisiones en el transporte público.
13-Utilizar energías renovables en infraestructura y edificaciones.
14-Evitar los asentamientos en zonas de alto riesgo o de riesgo no mitigable.
Con base en estas verdades que nos representan la crisis climática, la Administración Distrital reta a la ciudadanía, empresas, entidades públicas y las organizaciones ambientales a cambiar sus hábitos y contribuir con pequeñas acciones para que Bogotá sea cada vez una ciudad más sostenible y resiliente al cambio climático.
Fuente: Alcaldía Mayor de Bogotá.